Guillermo Aguilera Pastene: primer fallecido institucional en acto de servicio
En un emotivo homenaje en el Mausoleo Institucional el General Director Ricardo Yáñez Reveco declaró el 12 de junio como “Día del Mártir”, en homenaje a Guillermo Aguilera Pastene: el primer muerto institucional en acto de servicio, quien falleció el 12 de junio de 1927.
La muerte de un Carabinero en actos del servicio, genera reacciones en la sociedad, en tanto, es la ciudadanía la que manifiesta su tristeza y pesar, por quien entregó la vida cumpliendo su deber. Dentro de este contexto, las autoridades realizan enfáticos llamados, para apreciar y valorar la difícil tarea de servir a otros.
Técnicamente, se entiende por personal fallecido en actos de servicio aquel cuyo deceso se produce en alguna de las circunstancias que la legislación prevé como “accidentes en acto de servicio, cuya regulación normativa está contenida en los artículos 63° de la Ley N° 18.961”. Es decir, acto de servicio, corresponde a la muerte por la acción de terceros a razón de una interacción policial o como resultado de un accidente de cualquier naturaleza. En paralelo, los actos heroicos del servicio implican la muerte, ya sea en condición de franco o de servicio, producto de una acción de excepcional valentía y arrojo, plenamente voluntaria y consciente del riesgo que ella significa para su vida, sin que ésta le sea exigible legal ni reglamentariamente.
Guillermo Aguilera Pastene
El primer funcionario institucional que perdió la vida en acto de servicio fue el Vicesargento 1º Guillermo Aguilera Pastene, de dotación del 3er. Escuadrón del Regimiento de Carabineros N°4, que correspondía a la jurisdicción de la 11ª Comisaría de la antigua Policía Fiscal capitalina, quien falleció el 12 de junio de 1927, a casi tres meses de la fusión entre las Policías Fiscales y el Cuerpo de Carabineros, cuando se disponía a multar a un dependiente del local ubicado en calle 5 de abril 2950, hoy comuna de Estación Central, por expender alcoholes en forma ilegal; mientras acompañaba al Subteniente Óscar Garat. Tenía cuatro años, cinco meses y 23 días de servicio.
Aguilera nació en la provincia de Coquimbo y fue miembro de la Policía Fiscal durante un tiempo. El 20 de diciembre de 1922 se reincorporó a la institución como Guardián 3º, en la 3ª Comisaría de la Policía de Santiago. El 10 de mayo de 1923 fue trasladado a la 11ª Comisaría de Santiago de la Prefectura Nº6, Santiago. Ese mismo año ascendió al grado de Dragoneante, equivalente en esos años en Carabineros de Chile a Cabo 2º, y el 16 de mayo de 1925 al grado de Guardián 2º.
El 30 de mayo de 1927, 13 días antes de su fallecimiento, ascendió a Vicesargento 1º y fue trasladado al 3º Escuadrón del Regimiento de Santiago N°4. Contrajo matrimonio con Julia Meza Muñoz, con quien tuvo cuatro hijos. La descendencia de ellos constituye cinco nietos, nueve bisnietos y una tataranieta.
Sus restos fueron sepultados en el Mausoleo Policial y sus funerales contaron con la solemnidad que caracteriza a estas ceremonias. A ella asistieron jefes, oficiales y delegaciones institucionales. La banda de músicos y el estandarte encabezaron el cortejo que fue seguido por otros carruajes.
A la fecha 1.225 Carabineros a nivel nacional han fallecido en el cumplimiento del deber. La necesidad de rendir homenaje a los caídos en actos de servicio permitió inaugurar el 26 de abril de 1989 el monumento Gloria y Victoria, la pieza fue esculpida por el artista chileno Héctor Román y se ubica en Av. Bernardo O´Higgins a la altura del 200.
Imagen: donada por la familia.